Aterrizando en New Delhi: mi primera mala sorpresa

Llegué a New Delhi con la intriga de saber porque la gente amaba tanto India pero hablaban tan mal de este lugar y nunca lo descubrí.

 

Cuando el avión de Cairo a New Delhi me esperó

El avión a New Delhi

Esta historia debe comenzar por mi viaje en avión que es imperdible.

Llegaba de Egipto

Había tomado un bus de 12 horas desde el Sinaí hasta Cairo, donde esperé 5 horas, luego un avión 5 horas hasta Arabia Saudita y ahí me quedé dormida en el piso como los cientos de personas que había en el aeropuerto.

Cuando desperté ya habían cerrado la puerta de mi avión.

Pregunté qué debía hacer y luego de hacer unas cuantas llamadas, pararon el avión. No lo podía creer, me enviaron un bus solo para mí, que me llevó durante media hora. Era el avión más lleno y grande en el que he viajado.

Mi puesto estaba libre, pero aún así las azafatas me ofrecieron un asiento arriba, en el segundo piso, donde iban ellas, el copiloto y nadie más. Así que me pude ir acostada durmiendo, el copiloto me pasó 3 almohadas para que estuviera más cómoda. La comida no se la imaginan, un desayuno gigante y delicioso, y un almuerzo aún mejor.

Nunca había estado tan atendida en un avión tan bueno con un servicio tan maravilloso y si vieran la primera clase, eran camas acolchonaditas. Estaba feliz. Pero al llegar a India, todo comenzó con el pie izquierdo.

 

La pérdida de mi maleta

 

Mi maleta no había llegado. Y no solo sería la mía sino 800 maletas extraviadas ese mes en Saudia Airlines y 2000 el mes pasado.

 

En esta ocasión no tengo video grabado con la cámara (por seguridad), pero hice un video con las historias de instagram  espero que les ilustre un poco más este viaje. También los invito a que miren mis historias destacadas de India en Instagram donde tengo un resumen de lo que fue este gran viaje.

New Delhi

 

Swaminarayan Akshardham

este es Swaminarayan Akshardham un templo dedicado al turismo, lleno de joyas y de lujo, uno de los pocos lugares turísticos que visité en Delhi.

Muchas veces había imaginado el caos, pero no lo había visto.

El 28 de Junio llegué a New Delhi. La ciudad que todos me dijeron que no valía la pena visitar. Había decidido darle una oportunidad de 2 o 3 días, pero nunca imaginé que serían 13.

El hostal en New Delhi

Por suerte llegué a un hostal hermoso, se llama The Mystic Soul Hostel , está ubicado en Greater Kailash, reconocido por ser uno de los mejores barrios de Delhi, lleno de vigilantes de seguridad, de casas enormes, parques, un lugar en el que puedes caminar tranquilo hasta de noche, cosa que en India es escaso.

Está rodeado de parques, es limpio y seguro, y lo mejor del hostal es la comida, por 100 rupias (1,5 dólares) te sirven la comida más rica que probé en India. Además es super barato, pagué 350 rupias por habitación compartida (5 dólares) aunque tiene femeninas y privadas, claro que el precio puede variar dependiendo de la temporada y de la evolución del hostal. Varias veces olvidé mi computador todo un día por ahí tirado y no pasó nada. (no significa que debas dejarlo, pero de verdad que es un hostal muy seguro). 

  Allí no verás el caos, no sentirás el peligro y te aconsejo que por nada del mundo te quedes en el centro.

El centro de New Delhi

El centro de Delhi (Old Delhi) es caótico, había imaginado el caos, luego de ver el cuadro del Jardín de Las Delicias o las pinturas de Brueghel el viejo, pero nunca lo había vivido como aquí, vacas en la calle gordas y flacas, gente hasta pa tirar p’al techo, enfermos, unos sucios, mujeres con vestidos hermosos, otros comprando, otros en el piso, en cada esquina y en cada situación, pitos ininterrumpidos, ladrones, basura, mototaxis por todos lados y en todas las direcciones, gente persiguiéndote, pidiéndote dinero, pidiéndote que te subas a su transporte, queriendo robarte, es un lugar horrible.

Algunos insistirán en querer conocerlo pero por favor no se queden ahí a dormir.

 

Perder el equipaje: De Compras en New Delhi

India te enfrenta con tus más grandes temores, dicen por ahí.

El primero con el que me enfrentó tan solo al bajarme del avión era perderlo todo, lo había imaginado, tal vez por eso estaba preparada, así que no lloré hasta el día 9, cuando la di por perdida.

Perder la maleta, cuando vives viajando desde hace 6 años significa perderlo todo, perder el trabajo, perder todos las cosas chiquitas y livianas que has podido conseguir, es volver a empezar de cero.

Por suerte estaba en un país barato y con el dinero que había ahorrado en Israel.

El primer día salí al mercado a comprar ropa, lo más importante, un pantalón, tres blusas, dos calzones y un brasier (ropa interior). El dueño del hostal me recomendó un lugar muy barato, Sarojini Nagar, fui con la ilusión de encontrar cosas hermosas a buen precio.

Lo más barato estaba a 100 rupias, que son como 1,5 dólares precio por el que en mi país y en muchos países que he visitado puedo encontrar ropa más bonita (si te metes en una galería de ese tipo), pero la mayoría de las cosas valían 250 rupias ósea 5 dólares, el precio que no me sorprendió por barato. Al  final gasté como 15 dólares ya que los brasieres no bajaban de 5 dólares y eran para mujeres tetonas (no para mí). 

Como todo lo malo viene acompañado de algo bueno, encontré un restaurante delicioso, Haldirams, es una cadena de restaurantes, pero solo recomiendo, el de ese mercado (Sarojini Nagar) era delicioso, los otros a los que fui “regulimbis pinguis”, aunque por lo menos son lugares donde puedes comer tranquilo, sin problema de irte a intoxicar y terminar arrepentido en el baño o en un horrendo hospital (una vez más antihigiénico). Ya que la mayoría de los lugares en India son extremadamente sucios, tan sucios que no te puedes imaginar.

 

 

El caos en New Delhi

Caminé por las calles sorprendiéndome con cada detalle, los ciclistas cargando cajas, a veces del tamaño de un carro, a veces del tamaño de una habitación, a veces cargan ladrillos, o tubos de alcantarillado, algo de admirar, pero que también demuestra su necesidad.

La gente pone en las aceras peluquerías, zapaterías, y talleres de bicicleta, y los policías no los molestan la mayoría de las veces, aunque si los pueden molestar.

Los otos, rickshaw o tuc tucs, (mototaxis) conducen como locos dementes, demostrando que el que primero se mete es el que tiene la vía, aceleran repentinamente para meterse entre los carros pasando a contados centímetros el uno del otro, frenan en seco, cada dos por tres, y a veces no alcanzan a frenar y entonces chocan, se miran cruzan dos palabras y continúa su camino, sin problema, mientras tanto el sonido de las bocinas no se suspende por tan solo un segundo. En India la regla dice que deben pitar cada vez que pasan un carro para avisar que estás ahí y que el otro carro no te cierre, y como son 27 millones de habitantes en Delhi, hay siempre un carro al lado del otro, por lo tanto los pitos nunca cesan.

Cruzar la calle es arriesgar tu vida, pues los carros no frenan para que pases, ni hay semáforos funcionales. Así que lo más facil es pegarte de un local y cruzar al lado de él.

Aprendí a moverme en el metro a la perfección, y conocí todas las maneras de ir al aeropuerto, en buses, taxis, tuc tucs y metro, la más fácil es ir hasta la estación central del metro, New Delhi, y desde ahí tomar otro hasta el aeropuerto, cada viaje me salía en 100 rupias, ósea 1,5 rupias, el precio de una comida. Aunque la mayoría de los trayectos son de 30 o 40 rupias. Si, india es barato, tan barato como mi país, Colombia o como muchos países de Suramérica.

Pero también puede ser caro. Por ejemplo, un día salí a tomar cerveza con unos amigos y por dos cervezas en la zona de los bares, me cobraron 12 dólares (800 rupies). También fui a un restaurante de 15 dólares, y aunque estaba rica la comida, no la cambiaría por la del hostal que vale 100 o por la de Haldirams de Sarojini Nagar de 250 rupies (3,5 dólares).

 

Otras compras

Aproveche esos días para que me arreglaran el compu, me cobraron 60 dólares, pero juro que valió la pena porque es un Mac y estaba para tirar a la basura. Para eso tuve meterme en lugares horribles con mi computador, todos tenían cara de ladrones, y uno con un mac en la espalda. Era el centro de informática de Delhi, un lugar sucio, lleno de basura de gente en la calle, de charcos oliendo feo, de gente ofreciéndote que entres a su negocio, gente pidiéndote dinero y mirándote mal, y pensaba como podría salir con mi computador de ese lugar, pero al final ahí compre mi celular y arreglé el computador y salí viva. 

Compré todo aquello que necesitaba comprar en una ciudad grande. Mi termo con filtro, que lo pedí por internet, y me costó 14 dólares. Unas sandalias Crocs (30 dólares) que me hicieron ampollas durante un mes y que por más que fui al siguiente día mostrando mis heridas para que me las cambiaran no me las quisieron cambiar. y compré una maleta (mochila) plegable y liviana en el Decatlon (5 dólares).

Delhi es una ciudad de 27 millones de habitantes mal contados, y no es la panacea, aunque debo decir que sería de las cosas que más me gustaron, aunque cuando me dijeron que tenía que volver a comprar los hilos me puse a llorar, y cuando me enteré que tenía que pedir la visa a Tailandia preferí hacer 40 horas de viaje para sacarla en Nepal y no en Delhi, en otras palabras no me han quedado muchas ganas de volver.

El día que perdí la esperanza de recuperar la maleta El adorable dueño del Hostal Mystic Soul, (isla paradisiaca en medio de la ciudad, donde me estaba quedando), se ofreció a acompañarme, y pidió hablar con alguien de la aerolínea, y no con un intermediario como lo venían haciendo.

Esa misma noche me dijeron que la maleta había aparecido, cuando yo ya había pensado en comprar una nueva y continuar mi vida.

 

 

Mis amigos en Delhi

Isha

Luego de recuperar mi maleta, me quedé dos días más en Delhi.

Uno para ir a la casa de Isha, una hermosa hindú que me encontró por instagram meses atrás, y fue mi primera amiga hindú. Me llevó a su casa, me presentó a su mamá, a su papá y me hizo engordar 7 kilos más en un día, probamos todo lo habido y por haber, todo delicioso, además me hizo ponerme un saree (vestido), me maquilló y quedamos como unas princesas. Fuimos al templo más conocido de Delhí y pasamos genial.

Anoche me quedé en la casa de @ishagupta3010 👧 que conocí hace unos meses por instagram. Me llevo a probar de todo, me paseo por la ciudad, 🏙 por el barrio, me presento a sus padres👨‍👩‍👧, y hasta me regaló un saree (vestido como este que no le pude recibir porque no me cabe en la maleta 😭) . ¡Me puso este y hasta me maquilló💄! Y ella se puso su preferido. Su madre tenía el armario de mis sueños👗 lleno de sarees de telas hermosas, llenas de colores y texturas. Cada una más bella que la anterior. Aquí en India ve uno mujeres vestidas así en la calle💁‍♀️, en cualquier lugar, princesas hermosas en medio de las galerías en el centro en el metro💃. Podría vestirme así todos los días, pero dicen que es dificil para entrar al baño🚽 y tambien para lavarlo en el lavamanos del hotel, ya que son solo 5 metros de tela, luego para colgarlo y que se seque, para meterlo en la maleta🎒, ya que por mas ceda que sea ocupa espacio y pesa. Quien me manda a ser tan viajera 🧚‍♀️😓 #saree #delhigram #maquillaje #hotel #tela #viajera

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Avi, me invita a un matrimonio en sudadera

También hice otro amigo que conocí en la estación del metro, Avi, él está estudiando español y habla muy bien, lo conocí preguntando que metro tomar en la estación, ya que reconoció mi inocultable acento latino.

Un día me llamó para que nos viéramos y le dije que no podía porque estaba deprimida por la perdida de mi maleta, entonces me dijo lo único que no podía negar: me preguntó si quería ir a una boda.

-“Pero no tengo ropa”

– No importa. Te veo en una hora ahí.

Así que me entregaron el computador, lo dejé en el hotel y me fui para la estación de metro donde quedamos.

Al llegar al metro, le pregunto a un chico por la puerta 2 y me dice

-“¿que haces aquí?, ¡este no es un lugar para una turista, anota el numero de seguridad (100) y ten mucho cuidado! ¿donde conociste a ese chico, que vas a hacer.?”

El caso es que cuando llegué, mi amigo me esperaba en la puerta y le dije, “mejor me voy, me dicen que no es seguro”.

Entonces me convence para que vaya con él, “ahí esta la familia, hay niños, mucha gente”

Fui con temor, aunque veía que el tenía cara de joven inocente. Llegamos al hotel y me dice: «entra en esa habitación (vacía), le digo que no y me quedo en la puerta, al poco tiempo empezaron a llegar las mujeres vestidas, el novio, la familia, y me relajé.

 

 

Matrimonio en India

matrimonio tradicional en India

 

La verdad es que no importaba que no tuviera ropa porque era extranjera, hasta me pusieron un turbante de hombre. Todos querían foto conmigo así no tuviera maquillaje, ni bellos vestidos, ni estuviera peinada.

Los vestidos más hermosos que he visto en el mundo, están sin duda en la India, la novia siempre de rojo llena de brillantes y oro, con un aro gigante en la nariz, que llega con una cadena hacia las orejas, un bindi dorado entre las cejas, las manos pintadas con henna, y con figuras de mandalas y el novio como un sultán.

Ella triste, pues los matrimonios en India suelen ser arreglados, por castas dinero y religión. A veces me sonreía, aunque no me pude despedir de ella porque al final comenzó a llorar como si nunca fuera a volver a ver a su madre. (algunos dicen que no la vuelve a ver, depende de la familia)

 

Matrimonio en New Delhi

 

Los otros vestidos también hermosos, llenos de velos, arabescos y brillantes. Los rituales duraron hasta las 5 am, todos marcados por billetes y pinturas. Pues como me decía Avi:

“En India, lo único que importa es el dinero.”

Yo fui como un hombre más, comí con los hombres, usé turbante y bailé con los hombres. Fuera del matri estaban los músicos durmiendo en la calle.

A las 5 am, cuando acabó todo, nos fuimos caminando al metro, pasamos por enormes basureros donde había gente cagando, vacas comiendo basura, gente durmiendo en el suelo, pasamos por mercados, que olían horrible, el suelo era todo un basurero, olía a una mezcla entre mierda, comida podrida, miados fermentados, y agua estancada, y ahí, estaba la gente vendiendo la comida, vendiendo frutas y verduras. Y aunque el día recién empezaba, Avi tenía ganas de vomitar, yo resistí las ganas de tomar unas fotos por miedo a que robaran mi celular pues no parecía un lugar seguro. Pero les dejo todo a su imaginación que seguro será mejor que la realidad.

 

Dormí con 6 amigos hindúes en la misma habitación y en la misma cama.

Avi me invitó a su casa, sus amigos prepararon comida picante, bailamos toda la noche, dormí con todos ellos en la misma habitación y en la misma cama pues era un gran colchón que cubría el piso de la habitación, yo dormí en una esquina y fueron muy respetuosos y nunca intentaron tocarme ni se sobrepasaron y todo eran del temido lugar de Kajuraho.

Aprendí que antes de comer siempre hay que lavarse las manos y la cara, un hábito que me parece muy hermoso, pues denota respeto hacia la comida ademas de higiene.

Avi vive en un barrio céntrico pero peligroso, de pequeños callejones y muchísima gente en la calle, voy a la tienda a comprar una gaseosa y el dueño de la tienda me pide el teléfono, es sordo mudo, entonces Avi me dice que no debo hablar con nadie en el barrio, pues hay mucha gente con malas intenciones. El me recoge en el metro, luego pide a su amigo que me lleve, al día siguiente es otro el que me recoge, no entiendo muy bien como funciona, supongo que es por seguridad, pero sinceramente siento un poco de temor, no de ellos, pero si del barrio, aunque sé que ellos me están cuidando y lo hacen muy bien.

Finalmente decido irme y Avi me dice que nos vayamos juntos a Kajuraho. Sus amigos hablan español, pues el principal turismo de la India viene de España, así que deben aprender español para trabajar como guías, ellos me han hablado del pueblo, solo sé que hay templos del Kamasutra, y me parece super interesante pues para mi siempre ha sido un mito la sexualidad y nunca imaginé que hubiera templos de 1000 años que hablaban tan abiertamente del sexo y mucho menos en India, donde hombres y mujeres no pueden ni tocarse una mano antes del matrimonio.

También me dijeron que a Kajuraho no podía ir una mujer sola, también me lo han dicho muchísimas personas, pues los hombres suelen  perseguirlas, las drogan, las violan y dicen que ahora andan por todo el país haciendo eso. En el siguiente post les hablaré de Kajuraho, el lugar que más me gustó en todo mi viaje a India.

 

 

La seguridad en New Delhi

Cuando estaba en Delhi pensaba tener todo bajo control, aunque nunca diré que es un ciudad segura, también se puede vivir a salvo. Cómo de puede vivir a salvo en Suramérica, teniendo cuidado. Pero les contaré todos los hechos incómodos que me ocurrieron ahí.

El metro es seguro, aunque un funcionario del metro “ayudandome» a pagar un pasaje se quería quedar con los 60 rupies de cambio. Pero fue muy chistoso, porque le paso el dinero, y el mete el billete en la máquina y tapa con su cuerpo el dinero que sale sin disimular, al final le digo que me de el dinero y me lo da. (Los Indios son como esas avestruces que meten la cabeza bajo la tierra y piensan que si ellos no ven nadie los está viendo… solo que esta vez no es un mito)

Cuando fui a Old Delhi me metieron la mano en el canguro (riñonera) por una ranura que había en la cremallera, agarraron mi celular y aunque forcejeó , no logró arrebatármelo.

Estuve en zonas donde no se ven mujeres, ni locales, ni turistas, en el centro de Delhi, ya que buscaba comprar alambre de acero inoxidable para las artesanías que vendo para viajar y creo que deben ser lugares peligrosos por lo menos me sentí muy insegura ahí y tensa.

Un día cerca del hostal, me siguió un hombre en la calle, lo vi tras de mi así que paré a comprar un chicle, y el paró, seguí hasta el paradero de buses y el paró, así que me tocó agarrar un taxi aunque estaba a pocas cuadras del hostal. Al subirme al taxi se acercó  a la ventana y se quedó mirándome muy de frente.

También miraban fijamente el celular cuando lo sacaba en la calle, sin disimular, como siempre, así que recomiendo no sacarlo en cualquier parte y mirar muy bien el entorno, así mismo, mis amigos me recomendaban no caminar hablando por celular sino hablar en lugares cerrados y luego salir a la calle.

En centros comerciales, metro y estaciones de trenes siempre hay un rayos X para mirar que no hayan armas, ya sea para prevenir el terrorismo o las armas.

 

Consejos para viajar a New Delhi

-Quédate en el barrio Greater Kailash,  el hostal Mystic Soul que te recomiendo (no me dan comisión ni nada, pero de verdad mejorará tu experiencia.) sino te gusta busca un hospedaje en esta misma zona.

-Agarra Uber u Ola (o su equivalente pero más barato), si quieres tener la experiencia de montar en rickshaw revisa el precio del Uber primero porque siempre te van a cobrar muchísimo más, regatea hasta pagar lo mismo. Sin embargo, en carro iras con aire acondicionado, irás más seguro, no tendrás que pelear el precio y escucharás menos los pitos.

-Compra una Sim Card en Airtel (equivalente de Vodafone), por 5 dólares te darán 1 GB diarios de internet durante tres meses y por 7  dólares tendrás 2 gb diarios durante tres meses, aunque después de los 700 MB el internet no suele funcionar el internet.  (una vez más es una estafa, pero una estafa barata)

-Utiliza Google Maps, ya que podrás ver qué líneas de metro debes coger o que buses te sirven para llegar a tu destino, seleccionas el destino y el icono de transporte publico y te dirá donde caminar y cual bus metro o tren tomar. Además tiene más información que maps.me

-Movilizarse cuando puedas en metro, ya que es muy rápido, seguro y cómodo, no suele llenarse mucho y hay vagones para mujeres.

-Cuando pagues algo revisa bien el cambio, y desconfía siempre de todo el mundo, no bajes la guardia

 

 

¿Recomiendo viajar a Delhi siendo mujer?

 

Es un país que tiene muchas restricciones a la hora de ser mujer.

-Debes cubrirte todo, incluso recomiendo una bulfanda alrededor del cuello que cuelgue para que te tape las tetas. Si te fijas en las mujeres de allá ellas lo usan ya sea con el saree o con otra blusa. 

-Delhi es mejor que otros lugares en India para una mujer sola. Sin embargo no deja de ser muy peligroso.

-No recomiendo que andes sola de noche.

-Ni que vayas al centro sola.

-Te aconsejo moverte en metro, en Uber u Ola y de día, (el rickshaw (tuc tuc) es incomodo y te estafa). Hay ciertas zonas que no son recomendables para caminar sola.

 

En conclusión, Delhi, no me parece un lugar cómodo para una mujer sola, pero es mucho más seguro que el resto de lugares que visité en India.

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